Los pisos de madera, salvo los pre-finished, necesitan, una vez colocados, ser pulidos para que adquieran una superficie perfectamente nivelada, uniforme y suave. Es necesario esperar unos 15 días después de la colocación para hacer el pulido. Así se da tiempo a que las tablas se asienten perfectamente, pues de lo contrario podrían formar "dientes" entre sí una vez efectuado el pulido.
Durante ese período de espera, el piso no deberá quedar desprotegido, sino cubierto con una capa de BIOIL, cera o parafina. Podrá transitarse 12 horas después de colocado e incluso apoyar muebles, pero en el momento de pulir los ambientes deben estar totalmente despejados y no debe haber otros gremios trabajando.
Un parquet o tarugado colocado hace muchos años y deteriorado por el uso puede quedar como nuevo con un pulido adecuado. Al pulirlo, puede optarse también por cambiar el acabado que tenía el piso. Por ejemplo, pasar de un piso encerado a uno plastificado o lustrado con Bioil.
Para una perfecta terminación, se recomienda la aplicación de una máquina rotativa con red abrasiva de grano 60, 80, 100 ó 120 (según la dureza de la madera) finalizando con disco de fibra (tipo Scotch Brite) color negro.